Personajes Alfonso Diez |
Aunque no se desee su uso, en
este caso se podrían aplicar varios calificativos de corte negativo.
Lo que hizo Ricardo Monreal en el Senado
fue una representación teatral con un guión elaborado para tender una trampa a
sus compañeros senadores y a la opinión pública y muchos cayeron en ella. Sus
mismas argucias lo exhiben.
Solicitó una licencia por 21 días a su
cargo en la que “renuncia expresamente“ al fuero constitucional para que la
procuraduría lo pueda investigar, elaborar la Averiguación Previa
correspondiente y fincarle los cargos que arroje la investigación.
Pero resulta que en 21 días la policía
no va a encontrar a los dos sujetos que fueron rescatados por un comando del
rancho de sus hermanos para preguntarles quiénes eran en realidad sus
empleadores. Hay ocasiones en que ni con 60 días de arraigo, o con el doble de
tiempo, se logran resultados y menos lo van a hacer en 21 días.
Dar a las autoridades 21 días para que
lo acusen formalmente es una trampa porque sabe que no lo van a lograr, así que
de esta manera regresará a ocupar su cargo en el Senado con piel de cordero y
condenando a sus acusadores.
Dice, además, que renuncia expresamente
al fuero constitucional que le otorga su cargo para que lo investiguen. Esa es
otra trampa porque Monreal sabe perfectamente que la solicitud de licencia,
conforme al artículo 111 constitucional, no le quita el fuero; para lograr esto
sería necesario un juicio de procedencia del desafuero, no basta con gritar “ya
no tengo fuero”.
Monreal habló ante el Senado con una
voz pausada y teatral, propia del mártir que está clamando inocencia; al salir
del recinto, para completar la farsa, lo esperaban su esposa y su hija, se
recargó en los brazos que ambas le extendieron y se alejó caminando con ellas.
La familia Monreal está en la mira de las
autoridades porque se encontraron 14 toneladas de mariguana en el rancho en
Zacatecas de dos de los hermanos del senador, se aprehendió a dos de los
individuos que empaquetaban y cargaban la droga en un transporte y cuatro meses
después estos fueron rescatados, junto con otros 51 encausados, del penal en
que se encontraban recluidos. Las dudas y sospechas alrededor del caso se
plantearon en el “Personajes” anterior a éste (20-V-09).
La PGR puede, de cualquier manera,
investigar al senador, con licencia o sin ella, y en el caso de que encuentre
algún delito qué perseguir deberá solicitar a la Cámara de Diputados que inicie
el juicio en que se determine si se debe o no proceder penalmente contra el
inculpado; si la respuesta mayoritaria es positiva, lo deja sin fuero. Por lo
pronto, lo único que tendrán que declarar las autoridades respecto al senador
es que no se le sigue ninguna investigación.
Ricardo Monreal declaró además que
quienes lo atacan están atacando también a Andrés Manuel López Obrador y a todo
el movimiento de izquierda en México y aquí cabe la pregunta: ¿El Peje es su
socio, o por qué lo mete en la bronca? ¿Y el “movimiento de izquierda”, como él
le llama, qué tiene que ver con las 14 toneladas de mariguana?
Y efectivamente, sus argucias lo exhiben porque al valerse con torpeza de argumentos que caen por su propio peso, para evadir su responsabilidad, lo que logra es hundirse más. El acusado que esgrime mentiras para defenderse no puede ser inocente. No cabe duda, el senador con licencia es un verdadero lobo de la política, pero quiere vestirse con piel de cordero. |